Este año sólo Bélgica y Holanda se salvan en ofrecer peras. La región de Emilia Romagna ya sabe que sus niveles de producción van a ser bajos por las heladas de la pasada primavera.
A los daños de la pasada primavera, se unen los provocados por la chinche asiática y por la emergencia fitosanitaria por las manchas marrones.
Es un año muy difício para la pera por esta enfermedad fúngica, que está provocando importantes pérdidas en la zona de Ferrara, Modena, Bolonia y en Emilia Romagna.
Es por este motivo que el consejero de Agricultura de Emilia Romagna, Alessio Mammi, va a poner recursos extraordinarios para la reactivación del sector de la fruta.
Mantuvo una reunión en esta semana con 40 organizaciones de productores para conocer el escenario y «apoyar a las empresas y los productores en estos momentos de crisis», señala una nota de prensa de la Consejería de Agricultura de Emilia Romagna.
La primera medida es iniciar el proceso de solicitud al Gobierno de indemnización por daños mediante el Decreto Legislativo 102/2004.
El manchado marrón no se incluye entre las adversidades asegurables y las enfermedades de las plantas, por lo que es posible solicitar, una vez determinado el origen de los daños y definidas las zonas afectadas, la activación del fondo nacional de solidaridad previsto en el decreto.
En lo que respecta al control químico y las estrategias de defensa integrada «se reactivará la mesa técnica para el manejo de la emergencia fitosanitaria que ya opera con el insecto asiático dentro del Consejo Regional Agropecuario» apuntó el consejero Mammi.
La región podría desembolsar 90 millones de euros para salvar la situación, ya que «la pera ha sufrido muchos males en muy poco tiempo», apuntó Mammi.
