Industria auxiliar

La holandesa Cerescon muestra la robotización de la recolección del espárrago

La firma holandesa Cerescon y Planasa mostraron la semana pasada en Francia una demostración de la recolección automática del espárrago blanco para subsanar los problemas de mano de obra.

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Las empresas de espárrago blanco fueron testigo durante la semana pasada de una demostración del Sparter, un robot recolector de espárrago blanco, propiedad de la firma holandesa Cerescon.

El Sparter es capaz de recolectar entre 3.200-2.200 espárragos en una hora y tiene una tecnología capaz de detectar el espárrago unos 10 centímetros por debajo del lomo del espárrago blanco.

El Sparter cosecha en torno a 3.000 metros cuadrados por hora y hace el trabajo de 15 recolectores.

Los sensores de la máquina se retiran antes de entrar en contacto con el espárrago blanco y los recolecta verticalmente, colocándose en un contenedor de 250 kilos.

El corte del espárrago es siempre similar para que el producto tenga una longitud de 22 centímetros. La firma holandesa señala que con esta máquina se consiguen unos espárragos más blancos y menos torcidos que los habituales cosechados manualmente.

No obstante, la recolección robotizada del espárrago blanco sólo puede hacerse en fincas preparadas para tal efecto y no siempre es eficaz, ya que la máquina aún no selecciona correctamente la unidad ni el calibre del espárrago.

Un punto a tener en cuenta es que la máquina necesita una separación adecuada en los lineos de cultivo para que la máquina pueda trabajar, ya que la maquinaria pesa 10.500 kilos. El precio de la máquina ronda los 375.000 euros y sus costes de mantenimiento rozan los 10.000 euros.

Cerescon señala que hay seis máquinas operativas actualmente en manos de empresas de espárrago blanco de Alemania, Francia y Holanda.