Los lineales de las cadenas neerlandesas están muy limitadas de fresas y frambuesas de Huelva, debido a los efectos de la tormenta Bernard del pasado mes de octubre, según nos informa nuestro corresponsal en Países Bajos, Francisco Megías.
La oferta de fresa de Huelva viene condicionada por bajas temperaturas, pocas horas de sol y menor superficie de cultivo en la provincia andaluza.
«La plantación de fresas no se completó hasta noviembre, lo que, unido al frío, hizo que en diciembre los volúmenes fueran sensiblemente inferiores a lo habitual. Diciembre ya es un mes con oferta limitada», afirma Rafael Domínguez, gerente de Freshuelva.
«Ahora tenemos que esperar a que haga más calor y haya más sol para poder recolectar mayores cantidades», añade Domínguez.
“La superficie ha disminuido un 5% en Huelva y los agricultores han preferido las variedades locales”, expone el gerente.
La oferta de frambuesa también fue significativamente menor en diciembre, dada la reducción del 21% de la superficie respecto a la campaña pasada, cuando ya había disminuido un 7,5% en el ejercicio anterior.
Bernard
«Y la tormenta Bernard en octubre tuvo un impacto directo en la cosecha de otoño. Marruecos, nuestro competidor directo, también se vio afectado por la tormenta», explica Domínguez.
«No esperamos ninguna mejora significativa hasta principios de primavera, pero de todos modos la cosecha este año nunca será abundante, dada la disminución de la superficie», afirma el gerente de Freshuelva.
La superficie de frambuesa va a la baja, ya que «el cultivo se ha vuelto menos rentable debido a la competencia de Marruecos, que vende frambuesas en Europa a precios agresivos», recordó el gerente de Freshuelva.
Domínguez recuerda que los productores se encuentran muy preocupados, ya que el Gobierno ha vuelto a recortar el suministro de agua en un 50 por ciento.