La exportación española a los 27 Estados miembros representó el 93% del total, con crecimientos en los tres primeros destinos: Alemania, con un 4% más y 3.080 millones de euros, Francia, con un 5% más y 2.074 millones de euros, y Reino Unido, con un 4% más y 1.599 millones de euros. En volumen, las ventas españolas también crecieron en Alemania y Francia, un 1% en ambos casos, totalizando 2,9 millones de toneladas y 1,9 millones de toneladas respectivamente. El volumen enviado a Reino Unido se estabilizó en 1,3 millones de toneladas.
La exportación extracomunitaria, por el contrario, se redujo un 5%, situándose en 809 millones de euros, con una diferencia importante entre los países europeos no comunitarios como Suiza y Noruega, donde las exportaciones también aumentaron (especialmente Noruega con un 46% más y 102 millones de euros) y los países fuera de Europa, donde las exportaciones en su conjunto han bajado un 12% totalizando 471 millones de euros. Esto se ha debido al retraimiento de los que eran los primeros destinatarios no europeos de las frutas y hortalizas españolas: Brasil, con un 29% menos y 62,7 millones de euros, Arabia Saudita con 47,1 millones de euros (-10%) y Emiratos Árabes Unidos con 45,9 millones de euros (-18%).
Los datos hasta noviembre ponen en evidencia la dificultad no sólo de abrir nuevos mercados, sino de consolidarlos, según FEPEX, como es el caso de Brasil, con un comportamiento positivo entre 2013 y 2017 y negativo en 2018 o los países de la península arábiga, también con retrocesos el año pasado frente a crecimientos de años anteriores.
