La Comisión Europea aprobó este martes la inclusión de la marca colectiva de cebolla, «Cebolla de la Mancha», en el registro de Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), un distintivo de la Unión Europea (UE) que busca aportar confianza a los consumidores, informó la institución.
La Cebolla de la Mancha se produce en la región de Castilla-La Mancha y es una hortaliza referente en el mercado nacional y europeo.
La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de esta Comunidad Autónoma española aprobó la solicitud de registro en 2020 con el objetivo de conseguir este distintivo de calidad que otorga la UE.
Según informó Bruselas en un comunicado, la calidad de esta cebolla tipo Recas se debe a la zona de producción y a la forma en la que se gestionan los cultivos.
El potasio, el magnesio y el calcio presentes en los suelos de la región son la fuente del dulzor característico de la «Cebolla de la Mancha», explicó la Comisión Europea.
«La demanda es tan fuerte debido a las características específicas en cuanto a color, tamaño, textura y sabor», aseguró.
La IGP pone de relieve la relación entre la región geográfica específica y el nombre del producto cuando su calidad, reputación u otras características específicas son atribuibles al origen geográfico.
Castilla-La Mancha es la región productora más importante de España, con más de la mitad de la cosecha nacional de cebolla.
A partir de ahora, en las etiquetas de los envases de cebolla, además del nombre con el que se comercializa el producto, deberá figurar el logotipo de la marca «Cebolla de La Mancha» con la mención «Indicación Geográfica Protegida».
Esta nueva denominación se añadirá a la lista de 1.610 productos agrícolas ya protegidos.