Así se desprende del informe anual «Alimentos de España» que elabora la entidad que gestiona la red de mercados mayoristas, Mercasa, cuya última edición se ha publicado este viernes y aglutina los datos más relevantes del sector agroalimentario.
En los últimos diez años se han abierto cerca de 3.000 supermercados e hipermercados, lo que arroja una media anual de 300 nuevos establecimientos; en 2018 se sobrepasaron las 800 aperturas y en 2019 se superaron las 600.
Además, desde 2015 se observan cambios relevantes en la estructura de esta red comercial: el número de supermercados pequeños y grandes se ha disparado más de un 14 %, mientras que cerraron las puertas 300 establecimientos medianos.
Las cifras apuntalan tendencias que figuran en estudios e informes de mercado, que destacan la creciente apuesta de los operadores por la proximidad con locales pequeños -por ejemplo las tiendas de gasolinera- y el interés en completar el parque de establecimientos con algunos más grandes -Mercadona es una de las cadenas que sigue esta política en sus reformas-.
El formato hipermercado en el último lustro ha aumentado aunque de forma menos expresiva (+ 3 %) y al cierre de 2019 había abiertos 494 establecimientos de este tipo.
El presidente de Mercasa, empresa participada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), José Ramón Sempere, ha destacado en el informe cómo en 2020 «la cadena alimentaria está sorteando con buena nota» la «prueba de superación» que ha supuesto la covid-19.
«De un día para otro, con el país paralizado, fuimos capaces de no romper lo que en jerga técnica se denomina cadena de suministro, traducido en la práctica en que nunca faltaron alimentos ni se interrumpió la capacidad de comprarlos; incluyendo en este caso también a los consumidores del resto de Europa y el mundo habituados a consumir productos españoles», ha insistido.
En su opinión, la pandemia ha «reforzado» el carácter esencial de la red de mercados, formada por 23 complejos logísticos repartidos por todo el territorio y que integran a cerca de 3.000 empresas especializadas en frutas, verduras, pescados, mariscos, carnes y otros productos de alimentación.
El documento también incluye un mensaje del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, quien ha instado al sector agroalimentario a «seguir consolidando el papel que juega como motor» de la economía española, una vez ha quedado demostrado su «carácter estratégico en materia de suficiencia alimentaria».
Planas ha señalado, asimismo, que la crisis sanitaria también ha acelerado la necesidad de acometer un proceso de modernización dirigido, fundamentalmente, a responder a las nuevas exigencias en materia de sostenibilidad medioambiental.