La firma Koppert lanza Capirel, un insecticida biológico que reduce hasta en un 80 por ciento los daños causados pro la Carpocapsa en frutales, además de la Grafolita y otros lepidópteros en peral, manzano y melocotonero.
Actualmente, las más de 100.000 hectáreas dedicadas en España a la producción de pera, manzana y melocotón tienen un grave problema en común provocado por los daños en fruto ocasionados, principalmente, por las plagas de lepidópteros como Carpocapsa (Cydia pomonella) y Grafolita (Cydia molesta).
Los productores españoles de fruta, concentrados en Cataluña, Aragón, Andalucía y Murcia, encuentran importantes dificultades para controlar estas plagas con las herramientas disponibles. Los métodos de control habituales son insuficientes para mantener a raya estas plagas cuyas poblaciones son cada vez más altas. Además, la previsión es que los niveles de plaga sigan creciendo cada año, por lo que los tratamientos actuales serán cada vez menos efectivos.
Koppert Biological Systems ha desarrollado un insecticida biológico especialmente indicado para el control de lepidópteros en frutales. Este insecticida, denominado comercialmente Capirel, basa su eficacia en el poder de acción de los nematodos beneficiosos Steinernema feltiae. Los nematodos son como gusanos microscópicos que se introducen en las larvas hibernantes de lepidópteros para reproducirse rápidamente en su interior y para alimentarse de ellas hasta matarlas. El nematodo Steinernema feltiae está adaptado al frío, por lo que es muy adecuado para la aplicación de otoño en huertos.