La Freight Transport Association (FTA) de Irlanda ha advertido seriamente a los transportistas británicos que vengan con la burocracia en regla para las mercancías que vengan desde el Reino Unido para evitar retrasos en la entrega en el punto de destino.
Durante la primera semana del Brexit se han dado casos en donde algunas partidas han entrado con retraso en Irlanda por no tener los papeles en orden y otras cargas no han podido entrar por falta de documentación.
El gerente de la FTA, Aidan Flynn, señala que «no es nuestro interés que los conductores estén atrapados en los puertos y en las aduanas durante horas y horas, por lo que se hace importante trabajar conjuntamente remitentes y transportistas para completar todas las aduanas, declaraciones de seguridad y notificaciones previas al embarque antes de mudarse a los puertos».
Hay varios importadores irlandeses que han empezado a cancelar pedidos a operadores del Reino Unido debido al coste considerable de preparar la nueva burocracia. Y es que los productores ingleses que exportan a Irlanda están trabajando con una media de 250 euros adicionales por envío, y los importadores irlandeses cancelan pedidos para pedirlos desde Europa, «a pesar de que lleva más tiempo, pero es más económico», apunta el logístico Vernon Mascarenhas de Nature´s Choice.
La gama de hojas, hortalizas, remolacha y miniverduras son los pedidos que más se están rechazando a importadores británicos para solicitarlos a productores y operadores del Continente UE.