La producción de cereza y almendra en la Región podría crecer exponencialmente aplicando técnicas de riego deficitario que logran conservar un rendimiento óptimo de los cultivos reduciendo notablemente el consumo de agua, según las conclusiones de los ensayos presentados hoy en una jornada de difusión de las técnicas de riego deficitario.
Ensayos de la UPCT en la Finca Toli de Jumilla han demostrado que es posible reducir un 40% el agua de riego manteniendo los mismos rendimientos de cantidad y calidad de las cerezas. La producción de cerezo en la Región se da únicamente en 350 hectáreas frente a las 27.000 que hay en toda España.
«El cultivo necesita de horas de frío, pero se podría extender mucho en el Altiplano de la Región con técnicas de riego deficitario, que reducen el factor limitante del consumo de agua y mejoran la rentabilidad», ha señalado el investigador agrónomo Rafael Domingo.
La UPCT también ha ensayado en la Región las técnicas de riego deficitario en almendro, logrando que reducciones de más del 50% del consumo de agua sólo reduzcan en un 20% la cantidad de producción.
Domingo ha concretado que se pueden conseguir rendimientos interesantes con únicamente 2.500 metros cúbicos por hectárea al año, una cuarta parte del agua con la que se riega en América.
«Lo importante es identificar los periodos críticos de cultivo de cada producción, en los que no se ha de limitar el riego, y los que momentos que sí toleran un déficit hídrico», ha apuntado el catedrático de la Escuela de Agrónomos.
Domingo ha apuntado que disponen de la tecnología para monitorizar los cultivos con sensores, que está comercializando la spin-off de la UPCT Widhoc, y ha añadido que, a pesar de que se cuenta con el conocimiento sobre cuándo y cómo usar esta técnica, «los agricultores aún son reacios a aplicarla».