Intermarché se enfrenta a una reestructuración tras los problemas derivados de la adquisición realizada a finales de 2023, que no salió según lo previsto, y que ha llevado a la cadena francesa a tener que tomar esta drástica decisión para poder seguir a flote.
Estas 21 tiendas que se cerrarán son parte del paquete que Intermarché compró a Casino como parte de su estrategia de expansión. Sin embargo, la cadena reconoce ahora que estos establecimientos han resultado problemáticos desde su integración.
Según el grupo, los locales presentan graves deficiencias estructurales, alquileres demasiado elevados y una pérdida de clientela significativa, heredada de una gestión anterior poco eficaz en términos comerciales.