Según un comunicado de prensa de Mapama, «la situación de nuestras reservas hídricas continúa siendo preocupante a pesar de las precipitaciones recientes, que no deben hacernos bajar la guardia».
El último año hidrológico, comprendido entre el 1 de octubre 2016 y el 30 de septiembre de 2017, ha sido, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el octavo más seco desde 1981.
«En el año hidrológico en curso -continúa la nota-, las precipitaciones acumuladas desde el 1 de octubre hasta el 31 de diciembre fueron un 43 % inferiores a los valores normales de este periodo».
En lo que se refiere a años naturales (enero-diciembre), el 2017 se ha cerrado como el segundo más seco desde 1965. Y hay que tener en cuenta, además, que algunas zonas de España afrontan el quinto año consecutivo de sequía.