Así se ha destacado hoy durante una visita a las instalaciones de la cooperativa, en Palos de la Frontera (Huelva), del delegado de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Antonio Augustín.
Éste ha remarcado que Fresón de Palos «se ha convertido en claro referente del sector agrícola onubense en materia de calidad, de innovación e internacionalización».
Ha subrayado además que esta cooperativa formada por 150 socios es «sinónimo de compromiso social, de liderazgo y ejemplo del cooperativismo bien gestionado y rentable, que atiende a las necesidades del presente y del futuro, anticipándose a las exigencias de los mercados».
«Se trata de un valor seguro para sus clientes, los socios y los trabajadores, un modelo que funciona y que genera beneficios, que invierte en el propio territorio y sirve para modernizar las propias instalaciones y poder seguir generando riqueza y empleo», ha añadido.
La marca Fresón de Palos se ha convertido desde su creación, en 1982, en la mayor productora de fresas de Europa, con una plantilla media de 90 trabajadores que llega a alcanzar en estos momentos de plena campaña hasta los 600 trabajadores por el incremento de recolectores y manipuladoras-envasadoras, siendo las mujeres las que suponen cerca del 60% de la plantilla.
Indirectamente, y a través de sus socios, en plena campaña llega a una contratación anual de hasta 5.000 trabajadores.
El delegado de Empleo ha querido recordar que «cuando hablamos de la fresa, en primer término, del fresón y los frutos rojos, de su producción y comercialización, hablamos de un sector estratégico y fundamental para Huelva, por la capacidad de generar riqueza, actividad económica, la diversificación y apertura de nuevos mercados, y la aplicación de tecnologías cada vez más avanzadas en los cultivos y procesamientos, con un compromiso por respetar al máximo el medio ambiente».