Fuentes de esta organización han indicado en una nota que el sector ha visto en un año cómo algunos insumos para la producción y comercialización de frutas y hortalizas han crecido, entre los que ha destacado el precio de la energía (+130 %).
Según sus cálculos, también se han producido fuertes aumentos en insumos con un gran peso ponderado en los costes totales de la producción en origen, como los envases y embalajes (+30 %), el agua de riego (+30 %) o la mano de obra (+10 %).
Ante esta situación, han propuesto «medidas que incidan directamente en la reducción de los costes de producción, ya previstas en algunos casos, pero pendientes de implementación», como la bonificación del gasóleo, así como la de plásticos y fertilizantes utilizados por las centrales hortofrutícolas y las explotaciones en un 15 %.
Respecto a los «inasumibles costes» de la energía, ha apoyado la puesta en marcha de un modelo de contratación adaptado a las especiales características del sector, con doble tarificación eléctrica a lo largo del año, ya prevista en la Ley 16/2021.
También ha reclamado la reducción de los costes energéticos que conlleva la desalación y ahora soportan los regantes, así como la mejora de la disponibilidad de fitosanitarios eficaces y la aplicación con carácter inmediato una política de autorización para usos excepcionales.
En el ámbito de las organizaciones de productores de frutas y hortalizas, Fepex apuesta por mejorar y profundizar las medidas de gestión de crisis de mercado, especialmente la retirada de producto, con destino a la distribución gratuita y a la alimentación animal.