Fepex ha expresado este martes su rechazo a la ampliación del veto, que comenzó el 7 de agosto de 2014, porque «la pérdida de este mercado no ha sido compensada ni por las ayudas comunitarias aprobadas los primeros años del veto, ni por el incremento de las exportaciones a otros mercados».
La organización ha explicado que las ayudas que aprobó la Comisión Europea, que se extendieron hasta la campaña 2017/18, fueron medidas excepcionales de apoyo al sector de frutas y hortalizas para realizar retiradas de solo algunos productos y con unos contingentes muy inferiores al volumen exportado.
En 2013, antes del veto, la exportación española directa de frutas y hortalizas españolas a Rusia alcanzó un volumen de 230.729 toneladas, a lo que se sumaban otras importantes partidas originarias de España que eran re-exportadas desde Francia, Países Bajos y Polonia.
Los sectores españoles más afectados por el veto ruso han sido los de producción de melocotón (en 2013 se exportaron de forma directa 35.250 toneladas) y nectarina (29.525 toneladas).
En cuanto a la sustitución del mercado ruso, Fepex ha señalado que «no se han consolidado alternativas en otros países no comunitarios que compensen los volúmenes exportados» a este país.
De hecho, de acuerdo a sus datos, la exportación española de frutas y hortalizas a países no comunitarios ha descendido durante varios años.
Las ventas de frutas y hortalizas frescas a países extra-comunitarios se situaron en 897.128 toneladas en 2013; en 2015 alcanzaron las 868.774 toneladas; en 2017, las 830.642 toneladas y en 2018, las 799.102 toneladas, han detallado.
La ampliación del veto fue aprobada por Rusia con la publicación del Decreto del Presidente de 21 de noviembre de 2020 Nº 730 «Sobre la prórroga de las medidas económicas especiales para garantizar la seguridad de la Federación de Rusia».
