La autorización ha llegado de manera tardía y este año no se va a poder exportar a Estados Unidos, por lo que habrá que esperar hasta 2018, ya que primero hay que cumplir con una serie de requisitos, como las inspecciones del Aphis y las exigencias sobre el color de la fruta, detalla Roberto Sánchez, presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), al diario La Nación. Sánchez ha destacado que en 2018 podrían exportarse a EE.UU. unas 20.000 toneladas por unos 50 millones de dólares.
Por su parte, Lucas Méndez, secretario de la Federación Argentina del Citrus (Fedecitrus), ha indicado que «el Senasa y su homólogo estadounidense comenzarán a trabajar en un plan de control para constatar que la fruta cumpla con los requisitos de exportación, como color, calibre y empaquetado