La Autoridad Portuaria de Alicante está redoblando esfuerzos para preparar la documentación necesaria, y obtener la autorización del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que será elevada a la Unión Europa (UE) para poder importar patata de Egipto.
Obtener la autorización podría demorarse hasta 15 meses, un plazo, según la Autoridad Portuaria, «demasiado elevado», que puede poner en riesgo esta importante actividad, que podría suponer hasta 2.000 toneladas aproximadamente por campaña, un mínimo de 400 Tn por transitario, que se sumarían a la actividad total del puerto alicantino.
Reacciones
Nada más conocer que la Autoridad Portuaria está tramitando esta autorización para la importación de patatas de Egipto a través del Puerto de Alicante, ASAJA ha manifestado su «indignación» y ha avanzado que solicitará «de inmediato» una reunión urgente con este organismo para que «recapacite sobre las graves consecuencias que puede tener en el sector agrario alicantino, principalmente en la comarca de la Vega Baja, en Elche y el Alto Vinalopó».
La organización agraria denuncia que esta iniciativa va en contra del principio de preferencia comunitaria y favorece la competencia desleal, justamente dos de los grandes problemas que lastran la rentabilidad del campo español.
El presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu, ha aclarado que la patata es un cultivo de gran arraigo en la provincia, disponible para su consumo en fresco casi todo el año, por lo que «no hace falta traerla de fuera, sobre todo de países que no cumplen con las mismas normas fitosanitarias que aquí tenemos».
ASAJA Alicante no comprende la decisión que ha tomado la Autoridad Portuaria de sacar pecho de tal acción. «No todo vale», remarca, por su parte, el secretario técnico, Ramón Espinosa, quien añade que el tejido empresarial alicantino ha de ser consciente de los graves problemas a los que se enfrenta el sector primario de esta provincia. «Si no nos apoyamos dentro de la misma provincia, entre sectores, ¿qué solidaridad podemos esperar de los de fuera?», se pregunta.
Muestra del perjuicio que supone la entrada de productos hortofrutícolas de terceros países es lo ocurrido con la calabaza de la Vega Baja, que en la última campaña sufrió importantes pérdidas económicas por la masiva entrada de la calabaza egipcia, disminuyendo las opciones de comercialización al agricultor alicantino, que ha tenido que competir con precios muy bajos, inferiores a los costes de producción.
Control fitosanitario
Por otra parte, el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria ha aprobado autorizar provisionalmente un espacio para albergar operaciones de control fitosanitario de especies vegetales (árboles de gran porte) y maquinaria agrícola de grandes dimensiones, para lo cual se destinará una nave existente en la zona de poniente con una superficie aproximada de 1000 m2 y 10 m de altura, cuya licitación pública, para el acondicionamiento de la misma, se realizará antes de fin de este año 2024.
Y es que, durante los primeros meses del presente año 2024, la Autoridad Portuaria transmitió a la Dirección General de Sanidad de Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal, la necesidad urgente de desbloquear la situación de las inspecciones de sanidad vegetal en relación con árboles y plantas de alto porte en el puerto, así como de obtener autorización para adaptar un espacio cerrado en nave, con las garantías necesarias para poder realizar estas inspecciones de árboles de gran porte, que permitan al importante colectivo empresarial de viveristas, principalmente asentados en el municipio de Elche, realizar las importaciones de estos árboles a través el puerto de Alicante, evitando que no tengan más opción que hacerlo a través de otros puertos como los de Algeciras, Valencia o Barcelona.