La orden incorpora nuevas directrices comunitarias sobre condiciones para examinar determinadas variedades de especies de plantas agrícolas y hortícolas, y actualiza las que ya existían de la Oficina Comunitaria de Variedades Vegetales (OCVV) y de la Unión Internacional para la Protección de las Variedades Vegetales (UPOV).
También refleja revisiones de listados de plagas y medidas para prevenir su presencia en los materiales de reproducción vegetal y plantones.