El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Planas, ha confirmado que los convoyes para garantizar el abastecimiento de alimentos «están funcionando» y que su cartera trabaja de forma conjunta con la de Interior y Transporte para asegurar el suministro.
Para ello, entre otras cosa, se han movilizado 15.500 policías y guardias civiles.
Planas ha considero que detrás de la huelga, convocada por una plataforma para la defensa del sector del transporte de mercancías a causa del alto precio del combustible, se encuentra «un grupo minoritario que usa la coacción y la violencia para que el abastecimiento no sea normal».
La misma idea comparte la patronal de la industria agroalimentaria, la FIAB, cuyo director general, Mauricio García de Quevedo, ha hecho un llamamiento a que se evite que la «violencia extrema» que están protagonizando los huelguistas del transporte de mercancías que impida trabajar a quienes desean hacerlo.
La principal patronal de cadenas de supemercados, Asedas, ha llamado a la responsabilidad del sector de transportes, especialmente de los convocantes y el cese de las acciones violentas «cuanto antes».
Su director general, Ignacio García Magarzo, ha apuntado que no tiene por qué haber problemas de abastecimiento en una cadena que ha demostrado su eficacia en circunstancias muy difíciles.
El Comité de Gestión de Cítricos (CGC) ha alertado también de que, si no se respeta el derecho al trabajo de los transportistas que no secundan la huelga, «en unos días» se pueden producir «rupturas en el suministro de cítricos a fruterías de barrio e incluso en los puntos de venta de la gran distribución».
En algunos de los grandes mercados mayoristas, como Mercamadrid, este jueves se ha registrado una mejoría, con el acceso de un 62 % de vehículos abastecedores respecto al mismo día de la semana anterior, tras una semana que acumula un descenso del 50 % en las descargas con motivo de la huelga de transportes.
Mientras, en Mercabarna, donde ha habido piquetes informativos en algunos accesos, el paro está afectando especialmente a los productos procedentes del sur de España como las hortalizas y frutas de temporada, los pimientos, berenjenas o la fresa, y alimentos frescos como el pescado del norte del país, que está teniendo dificultad para llegar a pescaderías y mercados locales.