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«El control biológico tiene soluciones solventes frente al Parvispinus»

Es el mensaje que lanzaron ayer todos los actores implicados en el control biológico, respaldados por el sector -Hortyfruta- y las administraciones implicadas -Junta de Andalucía y Ayuntamiento de El Ejido-.

Día grande en una convocatoria de prensa donde estaban muchos para hablar de las propuestas del control biológico para abordar los problemas del Thrips parvispinus y Scirtothrips dorsalis.

Los cinco operadores más importantes en control biológico: Koppert + Agrobío + Bioline + Biobest + CBC, respaldado por el propio sector de manos de Hortyfruta y las administraciones de manos de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de El Ejido, por ser el municipio hortícola más grande de Almería y el que más pimiento contempla en su superficie.

La convocatoria de ayer tenía a la presidenta de la patronal de esta actividad –IBMA (International Biocontrol Manufacturers Association) en España-, Marisé Borja, que describió los 16 depredadores que sirven para controlar los nuevos Thrips, así como los Nemátodos entomopatógenos, los microorganismos, las plantas reservorio y las sustancias naturales.

Un conglomerado de propuestas y soluciones que conjuntamente sirven para abordar el problema del Parvispinus y del Scirtothrips dorsalis.

«No es conveniente ni recomendable volver a matar a cañonazos ante plagas emergentes», recordó la presidenta Borja.

«Hay soluciones en el mercado por parte de las empresas del control biológico para controlar los nuevos Thrips, y no hace falta fumigar a todo lo que se mueve», recordó Borja.

El riesgo

La entrada de los nuevos Thrips ha provocado dudas entre los productores almerienses y «no es necesario poner en riesgo el valor añadido conseguido por Almería con el uso del control biológico», expuso la presidenta del IBMA en España.

El presidente de Hortyfruta, Juan Tomás Cano, recordó que se ha ralentizado el desarrollo del control biológico, aunque la tendencia es ir incrementando la superficie como mostró el secretario general de la delegación de la Consejería de Agricultura de Andalucía en Almería, José Antonio Aliaga, al mostrar la evolución de la superficie de control biológico.

En los últimos tres años se han invertido más de 36 millones de euros en la implantación del control biológico en Almería.

La Consejería de Agricultura ha estado muy presente al frente de este problema, hasta el punto de que ya se han tenido 14 reuniones para conocer la situación, donde en enero había mucho pesimismo y en mayo «hemos recuperado el optimismo sobre el control de la situación», recordó Aliaga.

Para el próximo 28 de junio, la Consejería tendrá una nueva reunión con el sector y las empresas implicadas para exponer detalles y conocer la situación.