En el primer semestre de 2021, el consumo de frutas y verduras de las familias italianas vuelve a los niveles anteriores al Covid, pero, en comparación con el primer semestre de 2020, el descenso es generalizado.
El Observatorio del Mercado de CSO Italia, basado en el procesamiento de datos de GfK, es claro: los 2,9 millones de toneladas de frutas y hortalizas frescas compradas entre enero y junio representaron una contracción del 5%.
En el análisis por categorías, el primer semestre cerró con un parcial de 1,48 millones de toneladas de fruta comprada, un 6 por ciento menos respecto a 2020.
El precio medio de compra fue de 2,27 € / kg, un 3% menos que el año pasado. Las diez especies de frutas más solicitadas fueron naranjas, manzanas, bananas, clementinas, fresas, peras, limones, kiwis, piñas y mandarinas.
En hortalizas, el período registró volúmenes algo inferiores al millón y medio de toneladas, con un descenso del 5% respecto a 2020.
En el ranking especial de hortalizas más vendidas destaca la patata, aunque por debajo del récord de 2020, con algo menos de 190.000 toneladas; seguido de tomates, zanahorias e hinojo.
Tras estas categorías, calabacines, ensaladas, cebollas, alcachofas, coliflor y brócoli fueron los productos más demandados por los italianos.
Desde principios de año, el precio medio de compra se sitúa en 2,02 € / kg, con un ligero descenso del 1% interanual.