España ya es el segundo destino más importante para los productores y comercializadores de brócoli asociados a Proexport, según reza su Memoria de 2019 con unas ventas que durante el ejercicio 2018-2019 superaron las 28.000 toneladas, muy por encima de las alcanzadas en Alemania.
Esta cifra radiografía el peso del mercado español entre los operadores de brócoli, ya que hace un lustro las operaciones con cadenas y mayoristas españoles eran anecdóticas.
“Las ventas de brócoli en España van como un tiro y la demanda es permanente año tras año”, señala Nacho Domenech, director general de Agromark, una de las empresas que han ido girando su comercio hacia el lado español.
La demanda española queda aún muy lejos de los grandes motores del consumo como Reino Unido, Dinamarca o la propia Alemania, pero ya se sitúa en una clase media con sus 1.250 gramos per cápita. “Ha sido una evolución exponencial, ya que empezamos con un consumo de 200 gramos per cápita hace casi 10 años y hoy estamos en una cifra propia de un país productor y con tendencia al alza”, señala Javier Bernabeu, director general de Sakata en España y miembro del colectivo +Brócoli, que dirige Toñi Piernas desde la campaña pasada.
Más información en el número 445 de la revista F&H.