La tendencia del consumo de frutas y hortalizas ‘bio’ en Francia no cerrará 2023 con datos agradables. «La demanda no está funcionando, muchos ejecutivos de ventas de los operadores ‘bio’ están terminando en la calle y los curriculum vitae que estamos recibiendo las empresas para ocupar puestos comerciales pertenecen a profesionales con amplia experiencia en el segmento ‘bio'», expone Jean Philippe Dareés, director comercial de Marquillanes.
No es el único profesional que señala que la dinámica del ‘bio’ no está en su mejor momento. «Es evidente que las empresas ‘bio’ están reduciendo su actividad logística porque las ventas no son las de otras campañas», apunta Jean Marie Alberny, director de Alma Transitaires.
Reacción
De hecho, las cadenas especializadas en ‘bio’ como Biocoop y Naturalia se plantean el cierre de algunos puntos de venta, porque la dinámica de la demanda se ha deteriorado desde finales de 2022.
Actualmente, las frutas y hortalizas ‘bio’ suponen menos del seis por ciento del consumo de la categoría y con tendencia al deterioro.
«Se ha plantado mucha superficie ‘bio’ de frutas y hortalizas en Francia, y hay algunas categorías donde existe más producto ‘bio’ que convencional», señalan desde Agence Bio.
La mayoría de las cadenas galas están frenando la inercia del bio. Es significativo que la cadena E. Leclerc haya limitado su presencia en sus tiendas. Ya era la cadena que menos categorías contemplaba en su expositor, y desde finales de 2022 en algunos puntos de venta ha quedado relegado a la mínima expresión.