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Internacional, Latinoamérica

El aguacate brasileño ya está en Japón

Brasil y Japón cierran el acuerdo para que el aguacate brasileño pueda entrar en el mercado nipón.

La Asociación Brasileña de Exportadores de Frutas (Abrafrutas) ha celebrado con satisfacción que Japón haya dado el OK para la apertura del aguacate de Brasil.

No ha sido un acuerdo fácil y no lo será, ya que un inspector japonés acudirá anualmente para certificar y calificar las centrales frutícolas que soliciten exportar al mercado nipón.

Será este inspector el que fije el visto bueno o el desacuerdo para cada central frutícola. De esta manera, las autoridades niponas se garantizan el cumplimiento de las estrictas normas fitosanitarias, asegurando que se envíen los productos totalmente sanos y certificados al mercado nipón.

Los datos

Brasil es un gran productor de aguacates con una cantidad de 338.000 toneladas durante 2022. Este subtropical se cultiva principalmente en las regiones de Sao Paulo, Minas Gerais, Paraná, Espírito Santo y Ceará, «regiones que tienen clima y suelo favorables para el desarrollo de variedades como el Hass y Breda», apuntan desde el colectivo Abrafrutas.

Brasil ha visto crecer sus exportaciones de aguacate y durante 2023 se expidieron 23.000 toneladas, con España, Países Bajos y Reino Unido como principales destinos.

El consumo

Japón importó durante 2023 más de 61.000 toneladas de aguacates, lo que supuso un incremento del 22 por ciento con respecto a 2022. No obstante, los volúmenes importados han descendido en los últimos años, por el fuerte incremento del precio, ya que Japón llegó a importar la cantidad de casi 80.000 toneladas durante el ejercicio 2020.

México es el mayor proveedor histórico de aguacate en Japón. Durante 2023 introdujo más de 45.000 toneladas, muy lejos de las 71.000 toneladas de 2019.

El segundo proveedor es Perú, aunque la dinámica peruana ha sido alcista y durante 2023 se acercó a las 15.000 toneladas, el mayor volumen exportado por los peruanos al mercado nipón.

Fuera de estos dos orígenes, las cantidades son testimoniales y ningún otro origen supera las 1.000 toneladas. Australia, Nueva Zelanda, Israel y USA fueron los únicos orígenes que introdujeron esta fruta tropical en el mercado nipón.