Según el informe de resultados enviado este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el grupo obtuvo una facturación neta de 3.465,3 millones de euros, el 8,5 % más que en los seis primeros meses del año anterior.
A pesar de la reducción del número de tiendas en un 4,3 %, con un total de 5.733 establecimientos, DIA ha destacado en un comunicado que las ventas netas crecieron en Argentina, Brasil y España, con el peso de la marca propia y de la venta a través de franquicias al alza.
El resultado bruto de explotación ajustado (Ebitda) alcanzó los 51 millones de euros hasta junio, el 6,5 % más que en el mismo periodo de 2021, y se mantuvo el margen en un 1,5 %, a pesar de que el resultado estuvo afectado por 40,9 millones de coste extra en energía y gasóleo, así como por 7,4 millones relacionados con el programa de remodelación de tiendas.
El grupo ha asegurado que ha logrado mantener ese margen sobre las ventas en el actual entorno económico complejo mejorando su gestión operativa y el control de costes.
Su deuda financiera neta sumó 476,1 millones, 71,9 millones más (+17,8 %) que en diciembre del año pasado, derivada sobre todo de las inversiones por valor de 134,3 millones realizadas dentro del plan del grupo de distribución para remodelar sus tiendas.
DIA ha asegurado que su plan estratégico está ejecutado en un 80 % de su negocio y ha considerado que los resultados del primer semestre representan «un punto de inflexión» que le permite entrar en una «fase de consolidación», con España como palanca estratégica, y un 68 % de su red de tiendas renovada.