El Grupo Operativo Smali ha conseguido, según un comunicado de la Universidad cordobesa, con sensores e iluminación led inteligente aumentar la cantidad de la cosecha y mejorar el control biológico de las plagas.
Así lo han comprobado a lo largo de dos años de investigación en una finca experimental en El Ejido (Almería), dedicada al cultivo en invernadero de pimiento picante naranja.
Con este sistema, la masa total cosechada en dicha finca aumentó en un 15,46 %; la población del depredador auxiliar Orius laevigatus creció un 13,51 % y, paralelamente, la infestación de trips -un tipo concreto de plaga- se redujo en un 4,32 %.
Módulos interconectados
El equipo investigador ha diseñado un sistema con tres módulos interconectados: uno de sensorización ambiental, que recoge información sobre las condiciones climáticas y del suelo; otro de visión artificial, que permite detectar y contabilizar la presencia de agentes biológicos en el entorno del cultivo, y un último módulo de control lumínico inteligente, principal aportación de la Universidad de Córdoba, que regula de forma dinámica la iluminación led en función de los parámetros registrados y las estrategias definidas.
Con ello, el proyecto no busca solo optimizar la fotosíntesis y el rendimiento del cultivo, sino también mejorar la eficiencia energética, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y facilitar el trabajo de los organismos de control biológico.
Proyecto Smali
El proyecto Smali puede aportar ventajas en el ámbito de la agricultura como mejorar la competitividad al reducir costos de producción y aumentar la calidad y cantidad de las cosechas, obtener certificaciones de calidad y acceder a mercados con mayor valor añadido.
Además, gracias a «su enfoque escalable y adaptable», el sistema podría implementarse en otras regiones agrícolas con condiciones similares a las de la finca experimental, facilitando la modernización del sector en diferentes zonas.
En el proyecto han participado diferentes agentes, como la empresa agroalimentaria UNICA Group, la Universidad de Córdoba, el Centro Tecnológico Tecnova, la empresa de base tecnológica Newlite y la empresa experta en soluciones ecológicas para el control biológico Bioline Iberia, que han aportado un enfoque multidisciplinar al estudio desde las perspectivas técnica, agrícola y de la investigación.