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Conceden ayudas por 4,2 millones de euros a la modernización de cooperativas agroalimentarias granadinas

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El consejero, Rodrigo Sánchez Haro, que hoy ha inaugurado la Asamblea General Ordinaria de Cooperativas Agro-alimentarias de Granada, ha instado, además, a «aprovechar la línea específica de incentivos para la fusión e integración de cooperativas que, con 3 millones de fondos autonómicos, la Consejería va a volver a convocar». En último término, y entre las políticas concretas para el sector, el consejero ha recordado «las posibilidades que recoge el Decreto de Entidades Asociativas Prioritarias, que permite obtener una mayor puntuación e incluso porcentaje de ayuda a los proyectos de estas entidades, entre las que recientemente se ha incorporado la granadina Coperalia».

Sánchez Haro ha insistido en que el aumento de la dimensión cooperativa permite «ganar en capacidad de inversión para modernizar las instalaciones, en innovación y para abrir mercados», pues estos son los retos a los que en la actualidad se enfrenta el sector agroalimentario por la competencia, en especial, de terceros países. «Necesitamos contar no sólo con una normativa adecuada, sino también con un tejido empresarial fuerte y con mayor dimensión», ha significado el titular andaluz de Agricultura, que igualmente ha reconocido en el caso granadino a «un sector moderno, competitivo y sostenible, donde mujeres y hombres deben aportar todo su talento potencial en igualdad de condiciones».

En este sentido, el consejero ha hecho una breve consideración del punto de partida del sector agroalimentario granadino, destacando aspectos tales como los 55.000 empleos que genera, el que represente el 7% del PIB provincial o que haya permitido en 2017 unas exportaciones por valor de 770 milones de euros. En esa radiografía de la agroindustria granadina, ha subrayado que las cooperativas «juegan un papel importante», así como determinados productos «como las frutas y hortalizas, con el espárrago verde como máximo exponente, el aceite de oliva, procedente en un alto porcentaje de olivar de montaña, y los vinos, que cada día están más en auge, entre otros productos elaborados».

Nuevos escenarios

El consejero de Agricultura se ha referido también al nuevo escenario que supone para el sector la nueva Ley de Agricultura y Ganadería de Andalucía, en tramitación parlamentaria en estos momentos. En este sentido, ha destacado algunos de sus aspectos que suponen grandes ventajas, como por ejemplo «la simplificación administrativa, el apoyo a la internacionalización y la promoción, la innovación o la mejora del equilibrio de la cadena agroalimentaria». Otras medidas incluidas en la nueva norma son el refuerzo del Observatorio de Precios, los sistemas de autorregulación y los códigos de buenas prácticas mercantiles, el control de productos con precios anormalmente bajos o sanciones con carácter realmente disuasorio, que siempre van a ser superiores al beneficio ilícito obtenido.

De otro lado, Sánchez Haro se ha referido a la futura Política Agrícola Común (PAC) post 2020, manifestando su preocupación por el anunciado recorte de presupuesto, en un 16%, un descenso que es aún mayor (del 26%) en Desarrollo Rural, lo que puede llevar a «una Europa de dos velocidades». En cualquier caso, ha reconocido algunos aspectos positivos de los reglamentos de la PAC que plantea la Comisión Europea, como el que se reconozca al agricultor pluriactivo o el establecimiento de una limitación máxima de ayudas (capping), aunque ha manifestado «que debería haber sido más ambiciosa, por lo que trabajaremos para que su diseño sea más eficaz».

Por último, ha defendido una PAC que «sea buena para Andalucía», apostando por que los planes estratégicos se diseñen a nivel de regiones. Ha esto ha sumado que los esfuerzos ambientales adicionales que se puedan exigir al sector cuenten también con un apoyo presupuestario adicional.