El cultivo, volumen y valor, de melón y sandía se mantienen estables, aunque baja la cosecha de fruta de hueso.
Los últimos meses han estado marcados por unas lluvias intensas en muchas partes del país que han dado paso a un aumento de las temperaturas en las últimas semanas; todo ello ha repercutido en el campo, que se encuentra ya inmerso en la campaña de producción de las frutas de verano.
Solo en Aragón, se han registrado siniestros en 16.000 hectáreas agrícolas por los efectos de las tormentas y los episodios de granizo del inicio de la semana, lo que eleva a 100.000 el número de hectáreas siniestradas en la región a lo largo de toda esta primavera.
En toda España, la superficie siniestrada en el conjunto de 2025 se sitúa por encima de las 375.000 hectáreas a 31 de mayo, con más de 46.000 siniestros.
En este sentido, la inestabilidad meteorológica de las últimas semanas de mayo, con recurrentes tormentas, se ha traducido en una superficie declarada con siniestro que supera las 204.000 hectáreas en el quinto mes del año, en su mayor parte por daños de pedrisco.
No obstante, las sensaciones de los productores son buenas, ya que por el momento los cultivos se están manteniendo estables, compensando, en el caso de algunos, el descenso de los calibres por la cantidad, aunque mantienen la vista en las próximas semanas.
Melón y sandía
Los últimos datos disponibles del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), correspondientes a la primera semana de junio, muestran unos precios superiores a la media de las cinco anteriores, tanto en sandía como en melón, que tienen además precios por encima de los valores medios.
La sandía en origen crece esta semana un 2 %, mientras el melón cae un 12,5 %, la menor oferta de la sandía en el primer tramo de campaña ha propiciado precios superiores a otros años que superan el 30 % del valor medio para esta semana.
Los precios por el momento son buenos, ha resumido el responsable de sandía de COAG, Plácido Pérez, ha explicado que este año hay más piezas por matas, frente a un campaña anterior que fue «mala».
«El año pasado el tiempo fue malo, llovió en mayo y se rompió el cuaje, no se pudo hacer polinización porque todo estaba húmedo», ha detallado, mientras que esta campaña «el campo está lleno de abejas».
Por su parte, el vicesecretario general de UPA Andalucía, Roque García, ha precisado que este año la superficie destinada a estos cultivos ha bajado, aunque en cuanto la calidad la producción «va a ser muy buena» debido a un tiempo que ha beneficiado.
Fruta de hueso
Según los datos del MAPA, en la primera semana de junio, los precios en origen están por encima de la media, aunque hay «ligeros descensos» en melocotón y nectarina amarilla (-1,6 % y –1,5 % respectivamente) y en cereza, ciruela y albaricoque las cotizaciones suben cotizaciones.
En general, las perspectivas no son tan buenas como en el caso anterior ya que, según ha explicado el responsable del sector de fruta de hueso de COAG, Osvald Esteve, ha habido problemas de cuaje por lo que se trata de una cosecha «correcta».
Asimismo, Cooperativas Agro-Alimentarias prevé que la campaña actual de la fruta de hueso tenga un 5 % menos de producción, respecto a 2024, con 1.440.786 toneladas en una cosecha que será más corta como consecuencia de «varios accidentes climáticos».
