Ya es oficial y lo ha anunciado el responsable de Semillas de Hortalizas de Bayer, Joachim Schneider. La empresa alemana está identificando a posibles compradores de su área de semillas hortícolas y «la venta está condicionada a que se reciban los permisos necesarios de las autoridades y se cierre definitivamente la compra de Monsanto», señala el ejecutivo alemán.
La firma no descarta a ningún inversor y no lo centra sólo en Basf, al que ya le vendió en octubre del año pasado su negocio de semillas de algodón, colza y soja. Bayer es consciente de «estas desinversiones podrían provocar reticiencias en otras áreas de la cartera de negocio, entre ellas las hortícolas», aseguran desde la empresa.
Bayer ha enviado una carta a todos sus proveedores y clientes para asegurar que «no se producirá ningún cambio a corto plazo, y mantenemos nuestro compromiso de seguir respondiendo a sus necesidades con la marca Nunhems», aseguran desde Bayer.
La empresa espera que la transición sea lo más fluida y posble, sin que se vea afectada la relación ni los servicios, productos o dedicación de Bayer hacia clientes y proveedores.