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Austria ocupa el duodécimo lugar mundial como importador de fresas

Austria se gana el respeto como importador mundial de fresa, teniendo en cuenta su dimensión -9,1 millones de habitantes- y adelanta que España es su proveedor de referencia de fresa importada al abastecer el 47 por ciento.

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«La demanda de Austria de fresas frescas importadas es alta y los precios del producto se mantuvieron estables durante 2023». Son los dos ‘inputs’ lanzados ayer por la oficina AgrarMarkt Austria, dedicada a recoger las realidades agrarias del mercado austriaco.

La campaña de fresas de España está a punto de comenzar y «España llenará los lineales de las cadenas austriacas en las próximas semanas con el grueso de la actividad de febrero a julio», señala la oficina agraria AgrarMarkt.

Austria es el décimosegundo importador a nivel mundial con un volumen de 21.000 toneladas importadas, cantidad «notable» para un mercado que tiene algo más de nueve millones de habitantes.

Los orígenes

España es el importador de referencia de la fresa internacional al acaparar el 47 por ciento del volumen, seguido de Alemania -25 por ciento- e Italia -18 por ciento-.

De hecho, «cuando hay disponibilidad de fresa austriaca, la oferta en los lineales se encuentra respaldada en gran medida por los productos importados», desvela el ente agrario austriaco.

El nivel de autosuficiencia de la fresa austriaca es del 44 por ciento, gracias a una producción de unas 15.000 toneladas y un volumen de consumo de fresas de 3,6 kilos por año.

Los precios

La evolución de los precios y el volumen de los dos últimos años de comercialización de fresas frescas mostró los picos de venta coincidiendo con la temporada local. Y fueron los meses más húmedos y los picos de fríos de mayo y junio de 2023 donde se produjo un descenso en la demanda entre la semana 20 y 24.

La campaña 2024 viene marcada por las incertidumbres. «Las condiciones climáticas extremas como tormentas, granizo y fuertes lluvias, así como la actual sequía y el aumento de los costes de producción, dificultan las condiciones marco y la planificación de este cultivo que requiere mucha mano de obra en toda Europa», desvela la oficina agraria.

No obstante, recuerda AgrarMarkt «la aceptación del consumidor sigue intacta y la fresa seguirá siendo un éxito de ventas tanto en fresco como en mermelada para untar».