Fuentes de Asaja Málaga han informado este viernes a Efe de que la semana pasada un socio del colectivo denunció la sustracción de 3.000 kilos de mangos, con el costo añadido de la rotura de vallas y materiales por parte de los ladrones para entrar en las fincas.
Asaja ha indicado que, además del daño económico para el productor, la fruta que se está sustrayendo no ha alcanzado todavía la madurez comercial, por lo que su venta «daña la imagen de calidad de los mangos de la Axarquía».
«Estos mangos no se encuentran maduros ni en estado óptimo y, al comprarlos a destiempo, pueden generar rechazo en el consumidor de cara a futuras adquisiciones del fruto», han precisado desde el sindicato agrario.
Asaja ha demandado al Ayuntamiento de Vélez-Málaga un especial control por parte de la Policía Local de los puntos de venta, mercadillos y fruterías para que no se venda fruta inmadura.
El colectivo espera que la puesta en marcha del Documento de Acompañamiento al Transporte (DAT) de productos agrarios y forestales contribuya también a controlar la venta de mercancía sustraída.
