Algunos productores argentinos de uva de mesa han señalado que, con el aumento de los costes, actualmente destinan uva principalmente a Brasil y al mercado interno. Esto provocó un descenso en la superficie de producción, lo que dificulta la apertura de nuevos mercados por la falta de producto.
Hay que tener en cuenta que entre 2007 y 2015 los envíos de uva fresca han mostrado un retroceso superior al 250 por ciento, lo que ha provocado una pérdida de 20 mercados. Actualmente, Argentina vende uva fresca a 17 países, señala el diario Los Andes.
A esto se une una fuerte competencia en uva de mesa por parte de la plaza chilena en cuanto a calidad y precio. Muchos productores señalan que el envío de uva argentina a otros mercados implica reducir costes, principalmente en el sector logístico,.
No obstante, el sector también ve este Plan Estratégico como una oportunidad, aunque habría que trabajar para actualizar los protocolos y temas de logística a medio y largo plazo.
