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Aragón promueve el consumo de la fruta y la leche en las aulas

Más de 136.000 escolares aragoneses participan en la décima edición del programa «Consumo de fruta y leche en las escuelas», una iniciativa financiada por la UE y el Ministerio de Agricultura y dirigida a fomentar hábitos alimentarios saludables.

Según informa el Gobierno aragonés, el programa arrancará a la vuelta de las vacaciones escolares de Navidad, el próximo 14 de enero, y llegará a 466 centros educativos de 259 localidades aragonesas.

Del total de alumnos participantes en la iniciativa, que cuenta con un presupuesto de un millón de euros, 27.031 son de Educación Infantil, 71.494 de Primaria, y los 38.001 restantes de Secundaria.

Este año, prácticamente se ha duplicado el número de centros escolares que han solicitado incorporar los productos lácteos al programa, hasta un total de 191.

El programa de la fruta tiene una parte fija que consiste en la distribución semanal de una ración de fruta por alumno, que llega al centro limpia y lista para el consumo junto a una servilleta de papel.

Las piezas que se distribuyen entre el alumnado se compran a comerciantes y productores del sector agroalimentario aragonés y preferentemente de proximidad.

Se envían las raciones justas, incrementadas en un 6 por ciento para que el profesorado de los centros pueda comprobar la calidad del producto.

Según el director general de Alimentación del Gobierno aragonés, Enrique Novales, el compromiso del profesorado con el programa ha favorecido su amplia cobertura entre los escolares de la Comunidad.

A su juicio, «otro factor que ha contribuido al éxito del programa ha sido la calidad del producto y del servicio, ya que el sector productor y comercializador de frutas es consciente que el programa escolar es su principal aliado de cara al futuro, y no escatima esfuerzos a la hora de suministrar un producto limpio, sano y sabroso al alumnado».

Asimismo, se realizan actividades paralelas como visitas a explotaciones hortofrutícolas, viveros o queserías, así como charlas, catas o la creación de un huerto escolar.

La cata de frutas es una de actividades principales y, como novedad, el pasado curso se incluyeron los frutos secos como almendras y nueces.