Así consta en un anuncio publicado hoy en el Boletín Oficial dela Junta de Andalucía (BOJA), en el que la Delegación señala que esta situación se mantendrá hasta que no se modifiquen las condiciones establecidas en el real decreto por el que se declaró el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19.
En este sentido, la Delegación apunta que «la rapidez de propagación del mencionado virus ha derivado en una importante crisis sanitaria, tanto por su gravedad como por su magnitud».
«La evolución de los acontecimientos y el estado actual de riesgo inminente y extraordinario para la salud pública apuntan hacia una posible situación de colapso de nuestro sistema sanitario, y demás servicios de emergencias, cuyas consecuencias, derivadas de la falta de medios humanos y materiales, se hará más notable en las zonas rurales más aisladas y remotas de nuestra región», añaden.
Por ello, la Delegación considera necesario minimizar los riesgos que «las actividades en el medio rural puedan producir situaciones de colapso de los servicios esenciales consideraros» por el real decreto.
La Junta indica que entre los instrumentos de prevención y control del fuego se encuentran las actividades sometidas a autorización previa y dentro de estas las quemas, «imponiendo las circunstancias actuales que se reduzcan al máximo las condiciones de riesgo en zonas forestales o de influencia forestal».
Así pues, se suspenden las quemas de matorral, pastos y residuos procedentes de tratamientos selvícolas, fitosanitarios y otros trabajos forestales, así como la quema de rastrojos o residuos en labores agrícolas que se realizan en Zona de Influencia Forestal y requieren de autorización administrativa «debidamente motivada».