Alemania es uno de los países del entorno europeo con tradición en el cultivo de berries. Es más, la cosecha se ha mantenido en la línea de la estabilidad en los siete años anteriores con una producción superior a 150.000 toneladas. La producción alemana está caracterizada por una fuerte estacionalidad que se concentra entre los meses de mayo y junio, aunque la campaña se prolonga hasta el mes de noviembre.
En cuanto a la importación es el principal receptor dentro de Europa, que recibió más de 113.000 toneladas durante 2016. Los mayores proveedores europeos son, por este orden, España, Holanda y Bélgica.
Texto completo: revista F&H