Ailimpo ha hecho esa valoración tras conocer que la Comisión Europea ha informado, a través del sistema de alerta rápida para alimentos de la Unión Europea (Rassf) de que, desde noviembre, 18 lotes de limón y siete de pomelo turco han sido rechazados, prohibiéndose su entrada y comercialización en la UE.
El rechazo se ha debido en todos los casos a la detección de residuos de Clorpirifos, Procloraz, Clorpirifos-Metil, Pirimifos-Metil y Buprofezín en concentraciones que superaban el límite máximo de residuos (LMR) establecido por la normativa comunitaria.
Las alertas se han comunicado por los servicios oficiales de inspección de Bulgaria (11), Eslovenia (4), Rumanía (4), Polonia (4) y Croacia (2).
Este «elevado» número de alertas, que supone un récord «sin precedentes», confirman las deficiencias del sistema oficial turco de control sobre la comercialización y uso de productos fitosanitarios, y ofrecen una información «clave» para las cadenas de distribución y para los consumidores europeos.
Para Ailimpo, esta situación debería «sin duda» ser tenida en cuenta por los clientes europeos cuando planifiquen sus calendarios de suministro de limón y pomelo desde Turquía «en las próximas semanas»