Inimaginable pero real. Las familias británicas quieren reducir su dependencia de los comercios tradicionales y supermercados a la hora de comprar hortalizas y las ventas de semillas hortícolas no profesionales se han incrementado, según recoge el diario Mail on Sunday.
A medida que aumenta la inflación, son más familias las que están comprando semillas vegetales no profesionales con el objetivo de ahorrar en el gasto de productos frescos.
Las primeras estimaciones señalan que una familia con un pequeño huerto, transformado en finca para frutas y verduras, puede llegar a ahorrar hasta 2.000 libras.
Los profesionales de las casas de semillas para los no profesionales están aconsejando a las familias que adquieran semillas de los artículos más caros en las tiendas como lechugas especiales o berenjenas.
Las ventas de semillas para los no profesionales se han incrementado por cuatro en comparación con el año pasado, según la firma Waitrose Garden.
La firma B&Q pone ejemplos e indica que el cultivo de moras, hinojos y espárragos se ha elevado en un 109, 73 y 136 por ciento, respectivamente.
Ejemplos
El ejemplo más palpable es el precio del tomate. «Los tomates cultivados en casa pueden costar tan sólo 5 peniques cuando los cultiva uno personalmente, mientras que el precio en la tienda es superior a la libra», señala el rotativo.
Otro ejemplo es para berenjena y hoja. Las berenjenas y las hojas pueden costar alrededor de 20 peniques por pieza si se producen en un huerto por la libra en las tiendas y supermercados.