Frutas

APAG achaca el aumento de paro a bajos precios o subidas SMI

APAG Extremadura Asaja ha afirmado que la falta de medidas, los bajos precios, las malas producciones o las subidas del SMI provocan "un gran aumento" del paro en el sector agrario extremeño, del 22,38 % en 2020 hasta los 13.432 desempleados.

Para el presidente de la organización agraria, Juan Metidieri, estas cifras «tan negativas» son la consecuencia de «la falta de soluciones» que están ofreciendo los distintos gobiernos a los problemas que arrastran producciones tan importantes en cuanto a la generación de mano de obra, como pueden ser los frutales, así como los bajos precios.

Este escenario está generando «un caldo de cultivo muy desfavorable» para poder luchar contra las cifras de desempleo, que «cada vez son mayores en el sector agrario».

Además, ha recordado Metidieri, a este contexto negativo se han sumado las reiteradas subidas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que «también han castigado al mercado laboral en Extremadura».

«Nos gustaría saber qué dicen ahora, con los datos sobre la mesa, los que pregonaban que la subida del SMI no tendría incidencia en el empleo», ha apostillado.

Cerrado el año 2020, el número de parados en agricultura se situó en 13.432 personas, lo que supone la cifra más alta desde marzo de 2016 y un 22,38 % más que el año pasado (2.456 personas más).

En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, en el régimen Especial Agrario se han perdido 2.846 afiliaciones (-4,92 %) en el año 2020, mientras que en España ha subido de media un 0,35 %.

Según Metidieri, en la serie histórica (desde el año 2000) no se ha cerrado nunca un año con unos valores de afiliación a la Seguridad Social en el Régimen Especial Agrario «tan bajos como los de 2020, ni tan siquiera en los peores momentos de la crisis de 2008».

Al margen de regímenes, la afiliación ha caído en el sector de la Agricultura en 2.809 personas, lo que supone un descenso del 3,7 %.

Para el dirigente agrario, si no cambian las políticas que se están llevando a cabo en el sector primario y se hace una defensa «clara y valiente», los datos sociales y de empleo «cada vez serán peores», con lo que «eso supone para la economía de Extremadura, pero también para la supervivencia del mundo rural».