De acuerdo a los datos del informe, España cuenta este año con 16,92 millones de hectáreas de tierras de cultivos -55.877 ha menos que en 2019 (-0,32 %)-; 8,33 millones de hectáreas forestales (-40.842 ha, -0,21 %) y 8,33 millones de hectáreas de prados y pastos (+50.762 ha, +0,61 %).
Dentro de las tierras de cultivo, las arables (cereales, leguminosas, tubérculos, cultivos industriales, forrajeras, hortalizas, flores y barbecho) han recortado su extensión total en 96.723 hectáreas (-0,83 %) y se sitúan en 11,46 millones de ha en 2020.
En esta categoría, el estudio destaca el leve descenso de la superficie de cultivos herbáceos (-2,10 %), que ha sido generalizado en todas las categorías a excepción de en la de cultivos forrajeros, y el aumento del 3 % de las tierras en barbecho, impulsado por el regadío sobre todo.
Entre los herbáceos y cultivos industriales se refleja el alza del 66,28 % de la todavía pequeña superficie dedicada a la quinoa (6.638 ha).
En hortalizas, cae un 23 % la superficie de melón y sube un 21 % la de sandía; descienden la de col-brócoli un -18 %, la de tomate otro -12 % y la de cebolla un -3 %, mientras que la de pimiento se mantiene (-0,54 %) y la de ajo crece un 4 %.
La superficie total de tierras de cultivos leñosos (cítricos, frutales, frutos secos, viñedo y olivo) supera los 5,31 millones ha, un 0,77 % o 40.694 ha más que hace un año.
Este incremento obedece fundamentalmente al aumento de los frutales no cítricos (+2,27 %) por la expansión que han experimentado el almendro y el pistacho, seguidos en menor medida por aguacate, nogal y castaño.
Los frutales cítricos (-0,1 %) y el viñedo (-0,3 %) descienden muy levemente su superficie y en contraste el olivar presenta un alza de un 0,65 %.