Agricultura precisó en un boletín que consiguió el compromiso con las uniones Empacadores y Comercializadores del Aguacate de Michoacán (Udecam), y Empacadores de Aguacate de Peribán (Ueapac).
También firmaron las asociaciones de Productores Exportadores de Aguacate de Jalisco (Apeajal), y la de Productores y Empacadores de Aguacate de México (Apeam).
Las empresas se comprometieron a capacitar a su personal en el procedimiento de exportación de aguacate a Japón, además de reforzar entre su plantilla los conceptos marcados por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) en cuanto a contaminación y plaguicidas.
Además, llevarán a cabo de manera anual una campaña de difusión y capacitación con sus productores asociados con la finalidad de minimizar la presencia de moléculas químicas y biológicas en los frutos.
También acordaron adquirir sus insumos de manera preferente en unidades certificadas por el Senasica y presentar ante la autoridad sanitaria mexicana los resultados de análisis de producto para residuos de plaguicidas de cada uno de los embarques de aguacate con destino a Japón.
Japón es el tercer destino comercial del aguacate mexicano, detrás de Estados Unidos y Canadá.
El valor comercial de las exportaciones al país asiático anualmente asciende a más de 149 millones de dólares, según la Secretaría de Agricultura.
La directora general de Inocuidad Agroalimentaria, Acuícola y Pesquera del Senasica, Amada Vélez Méndez, subrayó tras la firma del acuerdo que «el mercado japonés es uno de los más exigentes a nivel internacional en materia sanitaria y de inocuidad», por lo que pidió a los productores extremar sus medidas.
El 90 % del aguacate consumido en Japón proviene de México, el principal productor mundial de este fruto.