El cambio de tendencia que comenzó a manifestarse en 2016, declarado por la ONU “Año Internacional de las Legumbres”, parece haberse afianzado en los hogares españoles consiguiendo un incremento del 4,47% en 2019, 3,35 kilogramos/año per cápita frente a los 3,20 de 2018.
Los datos nos muestran que Cantabria es la comunidad autónoma con mayor empleo en sus cocinas de este componente esencial de la dieta mediterránea, con casi 5 kilos por persona y año. Cataluña y Navarra superan a su vez los 4 kg/pc. A la cola de esta clasificación se sitúan las Canarias con apenas 2,81, quedando también por debajo de los 3 kilos per cápita, Galicia y Andalucía. Recordemos, a este respecto que, expertos nutricionistas recomiendan la ingesta de 3 o 4 raciones semanales.
A pesar de lo positivo de estos datos, seguimos a una gran distancia de las cifras de décadas pasadas. Sin remontarnos mucho, a principios de este siglo XXI el consumo superaba con creces los 4 kg/pc (a años luz los de los casi 15 kilogramos por año de este pequeño tesoro nutricional en los años sesenta del pasado siglo).