Cítricos

La Unió pide a Agricultura 12 millones para luchar contra plaga del Cotonet

La Unió de Lladuradors i Ramaders ha reclamado a la Conselleria de Agricultura que establezca una partida de doce millones de euros en los próximos presupuestos para el trampeo masivo contra el Cootnet de Sudáfrica de los cítricos, una plaga importada que afecta a algunas zonas.

La organización agraria denuncia que, once años después desde su primera detección en la Comunitat Valenciana, concretamente en Benifairó de les Valls, «la situación es cada vez más grave» y la plaga está ya presente en amplias zonas citrícolas del Camp de Morvedre, Camp de Túria, la Plana Baixa y Los Serranos.

La organización ve «urgente» que la Generalitat «actúe ya con contundencia» frente la plaga «antes de que sea demasiado tarde» y por ello propone un presupuesto de 12 millones de euros para el trampeo masivo con el objetivo de poder subvencionar al menos la mitad de las trampas con feromonas que son necesarias para cubrir las zonas citrícolas de las comarcas más afectadas y evitar una expansión al resto.

En todas estas zonas hay una superficie citrícola de unas 43.800 hectáreas y el coste total del trampeo sería de 24 millones, según La Unió, que por ello solicita que ahora que se están perfilando los presupuestos de la Conselleria del próximo año se destine una dotación económica para subvencionar al menos la mitad del coste.

«La Conselleria, en función de sus competencias en materia de sanidad vegetal y dada la importante pérdida económica que este organismo nocivo está provocando en las explotaciones citrícolas, tiene la obligación de dotar un presupuesto que impida la propagación de esta plaga que genera daños económicos importantes provocados por la fuerte deformación que este insecto provoca en los frutos y que comportan su completa depreciación comercial», según afirma La Unió.

Recuerda que desde hace más de dos meses, de acuerdo a la normativa comunitaria, se prohíben todos los productos fitosanitarios formulados a base de la materia activa del metil clorpirifos que, hasta el momento, era la herramienta más efectiva para el control de esta plaga.

Para este primer año sin dicha materia activa de control, y con el objetivo de evitar una expansión de la plaga La Unió propuso la compra pública de un nuevo producto y que se implantara en unas 1.000 hectáreas de las zonas más afectadas como proyecto piloto y se estudiara así la efectividad en una superficie representativa de nuestra citricultura.

Sin embargo, añade la organización agraria, la Conselleria de Agricultura «no lo ha tenido en cuenta y los efectos de la plaga allá donde está presente son cada vez más evidentes».

La Unió reitera que la «responsabilidad primera de la introducción de plagas en nuestro territorio es de la Unión Europea y del Gobierno de España que no tienen en cuenta protocolos rigurosos de control de las importaciones que llegan al ámbito comunitario».

“Mientras no haya un control serio en origen de las importaciones y no se establezca el tratamiento de frío, las plagas seguirán causando un considerable quebranto económico tanto para las Administraciones Públicas como para los agricultores”, concluye la organización agraria.