Austria ha cambiado sus hábitos de consumo y ha elevado la presencia en los hogares. El consumidor incrementó su consumo un 20% en los hogares.
Este nuevo hábito propició generar 46.000 empleos nuevos en la distribución y en la industria alimenticia. y generar 4.600 millones de euros en su PIB.
Mientras otros sectores se han estancado, la distribucion y la agricultura no lo han hecho. La oferta doméstica se ha incrementado y la cesta de la compra se llena de productos austriacos.
Cada hogar gasta 600 euros de comida al mes y «muchos austriacos compran productos por costumbre», señala el Profesor Friedrich Schneider de la Universidad Johannes Kepler de Linz.
El profesor Schneider recuerda que «cuando un austriaco compra producto local, está incrementando la mano de obra doméstica».