El consumo de frutas y hortalizas se elevó algo más de un cinco por ciento en Francia en el periodo que va del 24 de febrero al 22 de marzo, según los datos facilitados por Kantar Worldpanel. Este incremento se produjo antes de la crisis declarada del Covid 19, pero ya se notaba cambios en los hábitos alimenticios.
Las frutas y hortalizas fueron las categorías que menos crecieron, ya que Francia se volcó con los productos de alimentación seca, no perecedera, como vegetales en lata, pasta o arroz, así como bizcochos.
Fueron los pequeños hogares de gente de mediana edad en la región de París, los que más aumentaron las compras «por temor a quedarse sin ellos. Durante la tercera semana de reclusión, el 29% de los hogares aún temían no poder obtener suministros. Una proporción estable. Los montos gastados por hogar aumentaron en promedio 48 euros durante este período histórico marcado por las compras de almacenamiento», señalan desde Kantar Worldpanel.
Francia ha seguido una dinámica similar a la española, porque durante el confinamiento los productos de cocina como harinas, azúcar, aceite o levaduras incrementaron sus ventas, porque el 75 por ciento de los compradores disponen de más tiempo para cocinar.