Fuentes de esta federación hortofrutícola han explicado este viernes que así se lo han solicitado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para que el Gobierno español se lo traslade a la Comisión Europea.
«La finalidad es permitir a los agricultores retirar productos recolectados o paralizar una parte o la totalidad de su producción para adaptar la oferta a la demanda cambiante y evitar que se prolonguen las perturbaciones de los mercados», han precisado en un comunicado.
Hasta la fecha, las medidas de gestión de crisis están ligadas a los programas operativos (PO) de las OP y permiten las retiradas del mercado de productos, la cosecha en verde o la no recolección de la cosecha.
Fepex además ha reclamado para el sector que se flexibilicen los PO de las organizaciones de productores para poder incorporar en ellos los gastos extraordinarios derivados de la crisis de la COVID-19 de forma independiente a los gastos corrientes de producción.
Entre esos gastos extraordinarios estarían los incrementos de los costes de transportes tras la aprobación de medidas urgentes o los de equipos individuales de protección.
Además, han solicitado al MAPA la «flexibilización de las medidas relativas al transporte de trabajadores a las explotaciones hortofrutícolas, muy intensivas en mano de obra, debido a que la limitación actual hace muy difícil la movilidad efectiva y siempre contando con las medidas de protección adecuadas».
