Esos comercios de «cash & carry» (comprar y llevar) están situados en 17 estados de Brasil (entre ellos 7 en Río de Janeiro, el más poblado de Brasil) y pasarán a integrarse en la red Atacadao de Carrefour que actualmente está formada por 187 tiendas , explicó el gigante de la distribución en un comunicado.
En concreto, esa transformación se llevará a cabo en un plazo de doce meses tras la realización de la operación, que está sujeta a una serie de condiciones, como su aprobación por la autoridad brasileña de la competencia, CADE.
Esas 30 tiendas (22 en régimen de plena propiedad y 8 en alquiler) totalizan más de 165.000 metros cuadrados de superficie comercial y en 2019 sus ventas representaron unos 600 millones de euros (2.800 millones de reales).
Carrefour espera que, gracias a la aplicación del modelo Atacadao, su volumen de negocios se incremente en más del 60 % y se optimice la estructura de costes, lo que debe permitir equiparar progresivamente su rentabilidad a un nivel próximo al de esa red.
El grupo francés es el «número uno» de la distribución en Brasil con más de 690 establecimientos, más de 87.000 empleados y unos 13.300 millones de euros (62.000 millones de reales) de cifra de negocios el pasado año.
Atacadao es líder de su segmento de «cash & carry» con sus 187 tiendas hasta ahora, 28 centros mayoristas y unos 9.000 millones de euros (42.000 millones de reales) de facturación en 2019.