Las normativas indican que los Estados miembros retirarán las autorizaciones de los fitosanitarios que contengan alguna de ambas sustancias activas a más tardar el 16 de febrero de 2020, aunque añade que existe un periodo de gracia para ello al que pueden optar los países comunitarios que expira el 16 de abril de 2020.
La CE, en un principio, había prorrogado el período de aprobación del clorpirifos y del clorpirifos-metil en plaguicidas hasta el 31 de enero de 2020.
Pero en su última declaración, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, en sus siglas en inglés), concluyó en su evaluación sobre dichas sustancias en la salud humana que existen ámbitos críticos de preocupación por su potencial genotóxico y neurotóxico.