Según informa la Junta en nota de prensa, el importe de la subvención por los gastos de puesta en marcha y gestión contemplados será el correspondiente al importe solicitado.
En este sentido, se podrá subvencionar hasta el cien por ciento de estos gastos, aunque «sin sobrepasar la cantidad de cien mil euros por entidad solicitante», y sin superar el cinco por ciento del volumen de negocio potencial medio estimado de los cinco primeros años del solicitante.
Desde el Ejecutivo extremeño destacan que en Extremadura la mayoría de las entidades agrarias, constituidas fundamentalmente por sociedades cooperativas agroalimentarias, tienen una dimensión «inadecuada» que afecta a la facturación, a los medios técnicos y humanos, y condiciona la reducción de su ámbito de actuación a un marco «exclusivamente local».
Esto, argumenta, imposibilita acceder a los mercados nacionales e internacionales con garantía de éxito, además de suponer una «dispersión de esfuerzos» y una «insuficiente concentración de la oferta», lo que retrasa la adecuada industrialización de los productos agrícolas y ganaderos, cuando la agroindustria es un sector «clave por su potencialidad» en la creación de empleo.