La cadena de supermercados Sánchez Romero espera acelerar su crecimiento en ventas después de cerrar 2018 con una facturación de 36,7 millones de euros, un 1,6 % más que el año anterior.
En un comunicado divulgado este martes, la compañía ha explicado que de cara al actual ejercicio prevé abrir su undécimo establecimiento -todos están localizados en la Comunidad de Madrid- y calcula que sus ingresos aumenten entre un 8 y un 10 %, un ritmo sensiblemente más alto del registrado en 2017 y 2018.
Según sus cuentas, en torno a un 6 % de su facturación ya procede de sus ventas a través de Internet y por vía telefónica.
Los responsables de la firma han recordado que su servicio exprés de entrega a domicilio permite recibir pedidos en tres horas, y han revelado que sólo en el primer cuatrimestre del 2019 los pedidos vía «online» han crecido un 30 %.
Desde la cadena de supermercados han apuntado que reforzarán su plantilla con 60 nuevos trabajadores para cubrir las vacantes generadas por la apertura de un nuevo local -estimada para el último cuatrimestre del año-, pero también debido al «crecimiento de ventas de la red actual» de tiendas, y que se sumarán así a sus más de 300 empleados.
Además, la empresa ha lanzado recientemente una nueva línea de negocio con servicios dirigidos exclusivamente a empresas, que abarcan desde «catering» hasta regalos, cestas de navidad, alquiler de espacios dentro de uno de sus supermercados y demostraciones culinarias «in situ».
Sánchez Romero nació en 1954 y actualmente está presidida por Enric Ezquerra, quien acaba de cumplir dos años al frente de la misma tras comprar la enseña junto a un grupo de inversores privados a la familia fundadora.