Italia ve como sus exportaciones de frutas y hortalizas se redujeron en un 15 por ciento en volumen y un 11 por ciento en valor comparado con los datos del ejercicio 2017. 307 millones de euros para las arcas de las exportadoras italianas, según los datos que refleja el Ismea (Instituto de Servicio para Agricultura y el Mercado Agroalimentario).
Este descenso de las exportaciones se ha debido sobre todo a la falta de disponibilidad de producto para exportar, sobre todo en la familia de manzanas y kiwis, y fruta en general.
En la mayoría de los destinos hubo descensos de la presencia italiana, pero cabe destacar el descenso en un 30 por ciento en valor de las operaciones con el mercado español.
Las manzanas y uvas se mantienen como los productos más exportados de origen italiano. El citado estudio del Ismea señala que las importaciones italianas de frutas y hortalizas se redujeron en un dos por ciento. Los italianos importaron 1,6 millones de toneladas. Las bananas, piñas, melocotones y fresas fueron las frutas más importadas por los italianos.
