Fuentes de esta organización han calificado de «momento histórico» la aprobación ayer de dichas extensiones de norma en la Asamblea General Extraordinaria de Afrucat con el apoyo del 85 % de los participantes.
«La fruta catalana está liderando un proceso pionero en el que se fijan el resto de zonas del Estado», han asegurado antes de avanzar que Afrucat está asesorando a otras comunidades productoras de fruta (Murcia, Extremadura y Aragón) que ven en la circunscripción económica hortofrutícola «una herramienta para ordenar el sector».
Cuatro de las extensiones de norma aprobadas se centrarán en «mejorar la información» para ayudar a los productores a «planificar estratégicamente su negocio», gracias a cuatro aportaciones sobre estocaje o entradas diarias de las variedades de esas cuatro frutas.
Las restantes tres extensiones de norma son de «carácter financiero» -para medidas de «innovación, calidad, promoción y nuevos mercados»- y se traducen en la aportación de 50 euros por hectárea tanto de manzana como de pera o de melocotón y nectarina.
Afrucat ha recordado que las extensiones de norma son de obligado cumplimiento cuando se eleven a ley para todos los productores catalanes de estos sectores.
Su aprobación ayer es el primer paso de un proceso que continuará con su presentación formal al Departamento de Agricultura catalán -que tendrá tres meses para publicarlas y elevarlas a categoría de ley-, y que a su vez tendrá que informar de ello al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y, más tarde, a la Unión Europea.